Miércoles, 07 Agosto 2013
El
Boeing 747-400, el avión con el que Tarmac iniciará su actividad
en
Teruel, se dispone a tomar tierra en la pista del aeropuerto de Teruel,
con el hangar al fondo. DIARIO DE TERUEL / DIEGO HERNÁNDEZ
Tarmac
inició ayer su actividad industrial en Teruel a lo grande, con un
Boeing 747-400 que aterrizó a primera hora de la tarde de ayer en el
aeropuerto en medio de una enorme expectación de cientos de personas
congregadas en el entorno del aeródromo. Procedente de Frankfurt
(Alemania), el avión de 70 metros de longitud conocido popularmente como
Jumbo aterrizó sin incidencias tras dos horas de viaje a las 15.10
horas, con quince minutos de retraso. Fue una imagen histórica en una
provincia en cuyo territorio nunca han aterrizado aeronaves de tal
envergadura, que necesitan para posarse una pista de casi tres
kilómetros, como la construida en Caudé.
El director del aeropuerto, Alejandro Ibrahim, supervisó el
aterrizaje desde la torre de control. Tras una “pasada” sobre la pista
para revisar la infraestructura, aterrizó y estacionó junto al hangar
sin ningún problema, a pesar de que en el momento de la maniobra se
registró “una pequeña racha de viento lateral” que para un aparato de
esta envergadura son “cosquillas”, bromeó.
El Boeing estrenará el centro de estacionamiento, mantenimiento y
reciclado (MRO) de aviones de la compañía participada por Airbus Tarmac,
que será el mayor de Europa cuando esté en pleno funcionamiento y que
debe generar cien empleos al completar su quinto año de actividad.
Mañana aterrizará un segundo aparato del mismo modelo. Ambos son
propiedad de la empresa holandesa Martinair y se espera que permanezcan
en el aeropuerto de Teruel durante alrededor de año y medio. En este
periodo, se mantendrá en condiciones de vuelo para que la empresa
propietaria pueda utilizarlo de nuevo cuando lo requiera.
Philippe Fournadet, presidente de Tarmac Aerosave, señaló que el
aterrizaje supone “el inicio de una nueva aventura en Teruel”, elegida
por la empresa para ampliar su sede original situada en el aeropuerto de
Tarbes y ya saturada y sin posibilidades de crecimiento.
Capacidad limitada
La compañía inicia su actividad en Caudé con una capacidad
limitada de estacionamiento, ya que hasta que no concluya la
pavimentación de la campa, en la que cabrán hasta 225 aviones, solo
podrá emplear para este fin la plataforma hormigonada situada ante el
hangar. Esta superficie puede acoger como máximo cuatro aviones del
tamaño de un Jumbo, que con 70 metros de longitud y 19 de altura es el
mayor que se comercializa en el mundo.
El Consorcio del Aeródromo-Aeropuerto, formado por Gobierno de Aragón
y Ayuntamiento de Teruel, prevé completar la pavimentación de parte de
la campa antes de fin de año. Pero, además de esta obra, Fournadet
insistió en que es “muy importante” conseguir la certificación
internacional para el aeropuerto, en la que ya se trabaja desde las
administraciones implicadas, para poder recibir aviones de todo el mundo
y no solo de los países europeos del espacio Schengen, como permite la
actual autorización.
El alcalde de Teruel y vicepresidente del Consorcio, Manuel Blasco
(PP), comparó con la llegada del ferrocarril a la ciudad hace más de un
siglo la expectación generada por el aterrizaje del Jumbo, que supone
“el punto de arranque de una empresa multinacional” en la provincia.